Origen · Alma · Emoción
Pago de Carraovejas marca el origen de Alma en el año 1987, momento en el que la bodega nace con sus primeras nueve hectáreas y el sueño de convertirse en un referente y una de las mejores bodegas de la Ribera del Duero. Tras más de treinta años de trayectoria, la calidad, la pasión por el detalle, la sostenibilidad y la innovación siguen siendo los elementos tractores.
Un sueño
Una ilusión allá por los años 70 fue el origen de todo. José María Ruiz, un joven segoviano lleno de inquietudes y curiosidades inició lo que hoy es este gran proyecto de la Ribera del Duero ligado a la familia Ruiz Aragoneses. En el año 2007, Pedro Ruiz, hijo de José María, toma las riendas del proyecto para dar un nuevo enfoque e ir más allá hasta convertirlo en lo que hoy es Alma.
Un terruño único en la Ribera del Duero
El viñedo se halla a una altitud media de 850 m. En nuestra finca se cultivan tres variedades de vid: tinto fino (tempranillo), cabernet sauvignon y merlot. Trabajamos varios tipos de viticultura adaptadas a la orografía de la finca que se puede definir como viticultura tradicional en el valle y viticultura de montaña, en unos casos con pendientes superiores al 30% y en otros con un sistema de terrazas en las laderas de pendiente muy pronunciada.
Elaboración en Pago de Carraovejas
Pago de Carraovejas conjuga un sistema singular de elaboración que combina el trabajo por gravedad, el uso de levaduras y bacterias propias del terruño y una delicada integración de la madera para la crianza. Siempre desde el exhaustivo control de todos los procesos en el que la pasión por el detalle es innegociable.
Toda la materia prima es de máxima calidad. Para ello, durante la vendimia se realiza una triple selección: tras la selección en viñedo, se realiza una doble selección en mesa: de racimo y de baya. Solo se seleccionan aquellas bayas que cumplen con los requisitos óptimos para entrar en bodega.
Gravedad
El transporte de uva hasta el depósito de fermentación se hace siempre por gravedad, sin bombas, tuberías ni mangueras, a través de un pequeño tanque llamado OVI y a través de unos depósitos rodantes –ORIS- de 500 kg. En Pago de Carraovejas fuimos pioneros en utilizar el sistema de elaboración por gravedad en la Ribera del Duero. Para mantener la identidad.
Los Vinos de Pago de Carraovejas
Pago de Carraovejas
Pago de Carraovejas es el respeto por el origen, el alma de una trayectoria y la emoción de un camino por recorrer. Pago de Carraovejas es la interpretación del valle; la máxima expresión del terruño. Desde un prisma de equilibrio y un carácter fresco, el vino se muestra con volumen y, a su vez, ágil. Rotundo y vibrante.
El enoturismo
El enoturismo en la Ribera del Duero tiene en Pago de Carraovejas a un referente. Las visitas en la bodega permiten conocer en detalle todos los procesos que intervienen en la elaboración de los vinos. A lo largo de la visita se degusta una selección de los vinos de Alma Carraovejas acompañados de una singular propuesta gastronómica propia elaborada por el equipo de Ambivium*.